El reconocido cantante Alejandro Sanz rompió el silencio tras las acusaciones públicas de la bailarina española Ivet Playà, quien lo señaló en redes sociales por haberla utilizado emocionalmente y por exponer conversaciones privadas. El descargo de Playà se viralizó durante el fin de semana, generando una ola de comentarios y repercusiones en plataformas digitales.
Dos días después, Sanz publicó un comunicado en su cuenta de Instagram. En un mensaje con fondo negro y letras blancas, el artista confirmó que sí mantuvo una relación afectiva con Playà, aunque lamentó el desenlace del vínculo. “Ivet, yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos, personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora”, expresó.
En el mismo comunicado, el músico también reveló que en el mes de mayo, Playà le propuso participar en negocios familiares. Sin dar más detalles, Sanz aseguró que consultó con sus asesores y optó por no involucrarse: “Nunca he sido partícipe de estas prácticas”.
El cantante cerró su mensaje deseándole a Playà que “encuentre su camino y felicidad”.
La controversia continúa generando repercusión en redes sociales, donde ambas partes sostienen sus versiones mientras el tema sigue captando la atención del público y los medios.
