En una noche que quedará grabada en la memoria del rugby nacional, Los Pumas lograron una hazaña largamente esperada: vencieron por primera vez en la historia a los All Blacks en territorio argentino. El triunfo por 29-23 en el estadio José Amalfitani, por la segunda fecha del Rugby Championship, no solo representa un resultado deportivo, sino también un símbolo de evolución, carácter y madurez del seleccionado argentino.
Una victoria con sabor a epopeya
El equipo dirigido por Felipe Contepomi llegaba golpeado tras la derrota sufrida en Córdoba el fin de semana anterior. Sin embargo, lejos de dejarse llevar por la frustración, Los Pumas salieron al campo con determinación y convicción, desplegando un juego sólido, agresivo y estratégico que les permitió dominar a uno de los equipos más temidos del planeta.

Hasta ahora, las tres victorias previas ante Nueva Zelanda habían sido en el extranjero: dos en Australia y una en Inglaterra. Pero esta vez, el rugido fue en casa, ante miles de fanáticos que colmaron las tribunas del Amalfitani y vibraron con cada tackle, cada avance y cada punto.
Actuaciones destacadas y momentos clave
- Pablo Matera se erigió como el líder indiscutido del equipo. Su entrega, presencia física y lectura del juego lo convirtieron en el motor emocional de Los Pumas.
- Los tries de Juan Martín González y Gonzalo García marcaron momentos de quiebre en el partido, demostrando la capacidad del equipo para capitalizar oportunidades.
- En el juego con el pie, Santiago Carreras, Tomás Albornoz y Juan Cruz Mallía estuvieron certeros, sumando puntos clave que mantuvieron a Argentina siempre por delante en el marcador.
El equipo mostró una defensa férrea, una actitud combativa y una inteligencia táctica que le permitió neutralizar el poderío neozelandés. Cada jugador cumplió su rol con disciplina y entrega, en una actuación colectiva que será recordada por años.
Lo que viene: Australia en el horizonte
Con este triunfo, Los Pumas suman su primera victoria en el Rugby Championship 2025 y se posicionan con renovadas expectativas para lo que resta del torneo. La próxima parada será en Australia, donde enfrentarán a los Wallabies en una doble jornada los días 6 y 13 de septiembre.
Este resultado no solo fortalece al equipo desde lo anímico, sino que también envía un mensaje claro al mundo del rugby: Argentina está lista para competir de igual a igual con las potencias.
El rugido que se escuchó en todo el país
La victoria ante los All Blacks en suelo argentino es más que un resultado: es una afirmación de identidad, un premio al trabajo constante y una inspiración para las futuras generaciones. En cada rincón del país, el triunfo fue celebrado como una fiesta nacional, con orgullo y emoción.
Los Pumas demostraron que los sueños se alcanzan con esfuerzo, y que el rugby argentino tiene un presente vibrante y un futuro prometedor.