En una noche cargada de emociones, Al Hilal dio el gran golpe del Mundial de Clubes tras vencer 4-3 a Manchester City en tiempo suplementario, en un duelo que ya se perfila como uno de los mejores del torneo. El partido, disputado en el Camping World Stadium de Orlando, quedó marcado por giros dramáticos, goles de altísima factura y una inesperada despedida del vigente campeón de Europa.
De la polémica al espectáculo
El equipo de Pep Guardiola comenzó ganando con un gol de Bernardo Silva, envuelto en controversia. Sin embargo, los dirigidos por Simone Inzaghi reaccionaron con rapidez: Marcos Leonardo y Malcom pusieron a los saudíes 2-1 arriba antes del descanso. La respuesta del City llegó con su goleador estrella, Erling Haaland, quien igualó el marcador en el complemento.
Tiempo extra cargado de tensión
La prórroga mantuvo la intensidad al máximo. Kalidou Koulibaly adelantó nuevamente a la “Marea Azul”, pero Phil Foden empardó el marcador con un tanto crucial para los ingleses. Cuando todo parecía encaminarse hacia la definición por penales, Marcos Leonardo apareció con un gol agónico que selló el batacazo del torneo y desató la euforia de los hinchas del club saudí.

Al Hilal, con ambición de campeón
La victoria coloca a Al Hilal en los cuartos de final, donde se medirá con Fluminense, que más temprano eliminó a Inter. El equipo saudí demostró carácter, eficacia ofensiva y determinación frente a uno de los rivales más temidos del planeta.
Con esta hazaña, Al Hilal no solo se mete entre los ocho mejores del torneo, sino que deja un mensaje claro: nadie está a salvo en esta Copa del Mundo de Clubes.
