Los Bomberos Voluntarios de Salta protagonizaron un emotivo momento en el programa Buenas Noches Familia, donde dejaron de lado por un rato sus tareas cotidianas para formar una banda de cumbia y presentarse en vivo. La actuación generó furor entre el público y sirvió como vehículo para visibilizar una problemática que arrastran desde hace años.
La institución, con 66 años de historia, está ubicada en pleno centro de la ciudad, rodeada por la municipalidad, una escuela y la comisaría. Lo que en sus inicios fue un punto estratégico, hoy se convirtió en un obstáculo: el tránsito congestionado, los autos estacionados en doble fila y las demoras en la llegada de los voluntarios desde sus casas dificultan la salida de los móviles y comprometen la respuesta ante emergencias.
Los bomberos remarcaron que la mayoría de los siniestros se producen en rutas o zonas periféricas, lo que hace aún más crítico cada minuto perdido para sortear el caos urbano. Su participación televisiva, impulsada por Guido Kaczka, no solo mostró su faceta más humana y creativa, sino que también movilizó la solidaridad del público para colaborar con el equipamiento y las necesidades del cuartel.







