El fútbol mundial ya tiene una cita imperdible: el próximo 27 de marzo de 2026, desde las 15 (hora argentina), la Selección Argentina enfrentará a España en la Finalissima, el duelo que reúne a los campeones de América y Europa. El escenario no podía ser más simbólico: el Estadio Icónico de Lusail, en Qatar, donde la “Albiceleste” tocó el cielo al consagrarse campeona del mundo en 2022.
Será la segunda edición de este renovado certamen que reemplazó a la extinta Copa Confederaciones. La primera, disputada en 2022 en Wembley, tuvo a la Argentina como protagonista y campeona tras golear 3-0 a Italia, flamante campeona de la Eurocopa en ese entonces. Aquel triunfo consolidó el resurgimiento del equipo dirigido por Lionel Scaloni, que venía de cortar una sequía de 28 años sin títulos con la conquista de la Copa América 2021.
La historia de Argentina en este tipo de cruces tiene otro capítulo dorado: en 1993, cuando el torneo se llamaba Copa Artemio Franchi, el equipo de Alfio Basile venció a Dinamarca por penales tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario.
Ahora, con el recuerdo aún fresco de la épica final ante Francia en el Mundial de Qatar —también en Lusail—, la “Scaloneta” buscará sumar un nuevo trofeo a sus vitrinas frente a una España que llega como campeona de Europa y con sed de revancha.
