Un equipo del CONICET, liderado por Martín Hechenleitner del CRILaR, descubrió en la Quebrada de Santo Domingo, Vinchina, La Rioja, el esqueleto de una nueva especie de dinosaurio que vivió hace aproximadamente 230 millones de años, durante el Triásico Tardío, período en el que aparecieron los primeros dinosaurios y los antecesores de los mamíferos.
El hallazgo, publicado en la revista Nature, fue denominado Huayracursor jaguensis. El nombre “Huayracursor” homenajea al viento, mientras que “Jaguensis” hace referencia a la cercanía con Jagüé, un pueblo ubicado a 40 kilómetros de la Quebrada de Santo Domingo.
La Quebrada de Santo Domingo es reconocida por su riqueza fosilífera. En la última década, se han encontrado restos de rincosaurios, cinodontes traversodóntidos y otros dinosaurios primitivos, aportando información clave sobre la evolución de los ecosistemas terrestres del Triásico.
El ministro de Ciencia y Tecnología de La Rioja, Gustavo Luna, celebró el descubrimiento y destacó que la obra del Centro de Interpretación en la Quebrada permitirá recibir a profesionales para futuras campañas, convirtiéndose también en un atractivo turístico.
Este hallazgo no solo amplía el conocimiento sobre los dinosaurios más antiguos de Sudamérica, sino que fortalece la investigación paleontológica en una región de gran valor científico y turístico.