En una noche cargada de tensión y emociones en La Fortaleza, Lanús logró una clasificación heroica a los cuartos de final de la Copa Sudamericana tras vencer 1-0 a Central Córdoba y superar la tanda de penales por 4-2. El gol agónico de Dylan Aquino en el minuto 91 igualó la serie global, y desde los doce pasos, el Granate mostró temple y eficacia para sellar su pase a la siguiente instancia, donde enfrentará a Fluminense.
Un partido de ajedrez táctico y corazón granate
Central Córdoba llegó al encuentro con la ventaja del 1-0 conseguido en Santiago del Estero y planteó un primer tiempo inteligente, con líneas compactas y una estrategia que neutralizó los intentos ofensivos de Lanús. El equipo dirigido por Mauricio Pellegrino, obligado a revertir la serie, tuvo dificultades para generar peligro en los primeros 45 minutos, donde el Ferroviario se mostró sólido y sin fisuras.

Sin embargo, el segundo tiempo fue otro cantar. Lanús salió con mayor decisión y comenzó a inclinar la cancha. Eduardo Salvio estuvo cerca de abrir el marcador con un potente disparo que se estrelló en el travesaño, y Rodrigo Castillo obligó a una intervención milagrosa de Alan Aguerre, que mantuvo con vida a los santiagueños.
Los cambios que cambiaron la historia
Pellegrino movió el banco y acertó: los ingresos de Dylan Aquino y Alexis Segovia le dieron frescura y amplitud al ataque granate. Aquino, juvenil con proyección, fue el héroe de la noche al conectar un centro preciso de Armando Méndez en el minuto 91, desatando la euforia en las tribunas y llevando la serie a la definición por penales.
Penales: Lanús fue pura eficacia
La tanda comenzó con nerviosismo para Central Córdoba, que falló sus dos primeros intentos: Gastón Verón y Braian Cufré no lograron convertir. Jonathan Galván anotó, pero su ejecución fue anulada por una infracción técnica al rematar con ambas piernas, en una jugada insólita que recordó la regla modificada tras un caso protagonizado por Julián Álvarez.
Lanús, por su parte, fue letal desde los doce pasos. Bou, Izquierdoz, Marcich y Marcelino Moreno ejecutaron con precisión y seguridad, sellando la clasificación con autoridad.
Próximo desafío: Fluminense
Con esta victoria, Lanús se mete entre los ocho mejores del torneo continental y enfrentará a Fluminense, uno de los equipos más fuertes de Brasil. El duelo promete ser de alto voltaje, con el Granate buscando seguir escribiendo páginas doradas en su historia internacional.
Declaraciones y clima en La Fortaleza
El estadio fue una caldera durante todo el encuentro. La hinchada granate no dejó de alentar y explotó con el gol de Aquino. Tras el partido, Pellegrino destacó “la entrega del equipo y el carácter para revertir una serie muy difícil”, mientras que Aquino, emocionado, expresó: “Este gol es un sueño, lo soñé toda mi vida”.
Lanús demostró que en el fútbol, la fe y la convicción pueden torcer cualquier destino. En una noche épica, el Granate volvió a rugir en el continente.