En el marco de la Fiesta Nacional e Internacional del Poncho, el stand de Aconquija se erigió como una verdadera ventana a su territorio, diseñado con precisión para destacar tanto su potencial turístico como su esencia cultural. Mucho más que una exposición: fue una experiencia inmersiva que permitió a los visitantes sumergirse en el alma de esta localidad catamarqueña.
Paisajes que invitan a descubrir
Desde el primer momento, la carpa de turismo capturó miradas por su ambientación que evocaba los valles y montañas que rodean Aconquija. La presencia de imágenes de lugares icónicos —como las Ruinas del Pucará— y la promoción de circuitos naturales despertaron el interés de quienes buscan destinos con propuestas de aventura, descanso y conexión con la naturaleza.
Diseño que comunica territorio
El stand fue concebido como un espacio institucional integrador, en el que cada elemento fue pensado para comunicar la diversidad de la región: desde mapas interactivos hasta paneles que invitaban a conocer sus festivales y corredores turísticos. Esta arquitectura comunicacional permitió que el público se llevara una idea clara del porqué Aconquija es un destino que “lo tiene todo”.
Sabores con sello local
La gastronomía también tuvo su espacio privilegiado, no solo como una muestra de productos sino como una estrategia identitaria. Quesos caseros, quesillos, embutidos y dulces artesanales de cayote ofrecieron un recorrido por los sabores ancestrales de la zona. Esta propuesta no solo deleitó paladares, sino que reforzó el vínculo entre producción local y turismo sostenible.
Cultura viva en acción
El componente artístico del stand elevó aún más su impacto. Bailarines locales ofrecieron presentaciones que combinaron danzas tradicionales y contemporáneas en una puesta inclusiva y emotiva. Más que un espectáculo, fue una declaración de orgullo cultural que conectó a los visitantes con las raíces profundas de la región.
Con esta presentación integral, Aconquija no solo se promocionó: se narró a sí misma, posicionándose como un destino turístico con alma, historia y futuro.


