El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, se sumó al creciente reclamo de mandatarios provinciales por el abandono de las rutas nacionales. En un mensaje contundente dirigido al Gobierno de Javier Milei, denunció que el deterioro de los principales corredores viales “no es una demora, sino un destrato sistemático” hacia las provincias.
Weretilneck centró su crítica en el estado crítico de las rutas 22, 23, 40 y 151, fundamentales para la producción y el turismo de la región. “Gobiernos van, gobiernos vienen, y las promesas se archivan. Pero la producción sigue saliendo por caminos destrozados, los turistas llegan por rutas intransitables y la gente se juega la vida todos los días”, manifestó.
Desde sus redes sociales, el mandatario provincial cuestionó el destino de los recursos que deberían destinarse a obras viales: “En 2024 el Estado nacional recaudó más de 2 billones de pesos por el impuesto a los combustibles. ¿Dónde está esa plata? ¿En qué provincia invierten? Porque en Río Negro, no”.

Frente a la consulta de por qué la provincia no interviene, fue claro: “No nos dejan. Las rutas nacionales son competencia de Nación. No se puede intervenir sin recursos, sin maquinaria, sin acuerdos”.
Y fue categórico en su posición: “Río Negro no va a usar sus fondos para cubrir la desidia de un gobierno que se borró”.
El gobernador también remarcó que su reclamo trasciende lo partidario: “Esto no es ideología. Es una pelea justa por lo que nos corresponde. Defendemos a los rionegrinos. Tenemos derecho a transitar por rutas seguras”.
El fuerte pronunciamiento se suma a los reclamos de otros gobernadores que alertan sobre el impacto del freno a la obra pública, especialmente en rutas, donde el deterioro incrementa el riesgo de accidentes graves y compromete la seguridad vial en todo el país.