Una jubilada de 86 años fue víctima de un violento asalto en su vivienda de Berisso, Buenos Aires. Dos delincuentes encapuchados y con guantes ingresaron al domicilio, la redujeron y se llevaron una suma superior a los 25 millones de pesos.
Los ladrones entraron sin necesidad de forzar la puerta y sorprendieron a la mujer en su dormitorio. Allí la amordazaron y la sujetaron del cuello hasta obligarla a revelar el lugar donde guardaba sus ahorros. Tras apoderarse del dinero, la ataron con un cinturón, le quitaron la llave de la casa y escaparon rápidamente.
La policía investiga el hecho y sigue dos hipótesis principales: un llamado telefónico sospechoso que recibió la víctima horas antes, en el que un desconocido se hizo pasar por un familiar, y la presencia de dos jóvenes merodeando en las inmediaciones de la vivienda en los días previos al robo.
El caso generó gran preocupación en la comunidad local por la violencia del ataque y la importante suma sustraída.
